jueves, 15 de octubre de 2009

La pelea y la aparición.

-Katherine, ¿podemos hablar un momento?
-Lo siento, Bella, pero no pienso salir.
-¡Ven acá estúpida!
 Bellatrix le cogió del brazo con brusquedad y la arrastró. La chica se resignar y se dejó llevar por su hermana.
 Bellatrix la llevó al pequeño jardín de flores que se ocultaba tras el monte.
 Un lugar perfecto para hacer de todo.
 Entonces la soltó y furiosa comoun basilisco le  dijo:
-¡Túúúú, pequeño parásito podrido!...
-¿Qué es lo que pasa, Bellatrix?
-No te hagas la cuenta, Katherine, sabes muy bien lo que pasa. ¡Te he pillado, hija del diablo!.
-Esto no...
-¡No me mientas! ¡Me has estado engañando durante todos estos años, asquerosa sangre sucia!
-¡Ah, se siente si la magia volvió a mí, te aguantas, asquerosa..."sangre limpia". Bruja nací y bruja moriré y quieras o no será siempre así, ¡Burguesa de cloaca!
-¡Maldita sea, vas a pagar por todo lo que has hecho!¡Pienso llamar a la policía!¡Vas a ir a chirona en menos que canta un gallo. Asquerosa sangre sucia...
Katherine miró a Bellatrix ceñuda, pero tragándose sus palabras. No quería empezar una pelea.
-Erea más luista de lo que pensaba. Desde siempre has sido una enciclopedia con patas pero verdaderamente debo admitirlo, eres brillante.
 Ahora Katherine se enfadó más. Otra vez la maldita oferta...
-Escúchame bien. Bellatrix,...estoy harta de que seáis tan pesados. A ver si os eneráis de que jamás de lo jamases voy a unirme a vosotros, ¡jamás!
-Eso lo sé, y no corre por mi cuenta, hermanita.
-He dicho no y es que ¡no!
-Pues me temo que tendré que acabar contigo...ya.
-De ningún modo voy a luchar contra ti ahora. Va contra la ley usar la magia en esta época... Al menos en mi caso-Dijo Katherine, poniendo los ojos en blanco, y disponiendose a volver a casa.
 Pero Bellatrix no la dejó marcharse.
´-¡Fucus niminetus!
 Unas cuerdas inmovilizaron a Katherine por las manos y los tobillos, simples pero fuertes.
-¡Bellatrix déjame ir!-dijo con voz aburrida.

 Entonces se sintió caer por el alcantilado.
 Ahora la levantó por los aires y la estrelló contra una roca.
 Al sentir el dolor sintió que aquello era la gota que colmaba el vaso.
 Katherine se hartó y perdió todo su autocontrol emocional. Bellatrix no tenía la más remota idea de a quién se enfrenaba. ¡Aunque ella pensara que sí!
 Se deshizo de las cuerdas con facilidad, y regresó a tierra con una vuelta grácil y elegante.
-¿Quieres guerra?Pues la vas a tener.
   Se acercó a Bellatrix a zancadas, varita en mano.
-Comprobemos si saber jugar.¡Experlliarmus!
-¿Eso es todo lo que sabes hacer?-rezongó Bella aunque la varita desapareció de su mano antes de que se diera cuenta.
-¡Legeremens duo!
-¡Uh! Señal de peligro...el complicado movimiento de mano y aquella señal indicaban que aquello iba a convertirse en una lucha salvaje.
 Y se convirtió en una lucha salvaje, muy salvaje.


 Pero se escuchó una voz que decía:
-¡Parad!
 Bellatrix siguió luchando pero Katherine sabía muy bien quién era. Intentó parar de luchar pero tuvo que defenderse.
 Pero la mujer las separó con asombrosa facilidad.